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Vapear aceite de CBD es seguro: ¿sí o no?

Cecilia Bianchi Escrito por Cecilia Bianchi
julio 8, 2019

Los vapeadores han irrumpido en el mercado de manera reciente, pero no es una industria poco significativa. Según los Centros Americanos para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en 2016 aproximadamente dos millones de estudiantes de instituto en EE. UU. había utilizado un cigarrillo electrónico en los últimos 30 días, lo que supone el 11% de todos los estudiantes de secundaria. Aunque en España todavía es un mercado incipiente, la Unión de Promotores y Empresarios del Vapeo (UPEV) afirma que casi medio millón de españoles ya se ha unido a esta moda, y el número sigue creciendo. Con el auge del vapeo y del CBD, muchos usuarios se preguntan si vapear aceite de CBD es seguro.

¿Por qué los vapeadores se han convertido en algo tan popular? Se suele decir que vapear es una alternativa al tabaco más sana y segura, pero ¿es cierto? En este artículo te contamos la verdad para descubrir si vapear aceite de CBD es seguro.

Una breve historia del vapeo

El vapeo ha existido durante siglos, aunque en formatos mucho más primitivos. Los antiguos egipcios, por ejemplo, utilizaban piedras muy calientes para vaporizar hierbas e inhalar el humo, y los hindúes han utilizado la cachimba durante milenios.

No cabe duda de que el cigarrillo ha sido predominante en el mundo occidental durante muchos años. En el pasado algunos médicos llegaron a prescribir cigarrillos para mejorar la salud de los pacientes. Ahora conocemos muy bien cuáles son los riesgos del tabaco y somos conscientes de que son perjudiciales para la salud, suponiendo incluso una de las primeras causas de muerte evitable en España.

Se suele decir que a Joseph Robinson se le ocurrió la primera idea de cigarrillo electrónico en 1927, aunque fue el cigarrillo sin tabaco y sin humo de Herbert Gilbert el que se patentó en primer lugar y el que realmente llamó la atención de los consumidores en 1963.

El primer cigarrillo electrónico moderno fue creado por Hon Lik, que registró la patente en 2003 en China. Llegó al mercado en 2004, y en apenas dos años ya se comercializaba en Europa. Llegó a EE. UU. en 2007.

A día de hoy el vapeo se ha convertido en algo muy popular. Mucha gente lo utiliza como una forma de dejar de fumar tabaco y otros comienzan a vapear sin haber fumado nunca. El problema es que, como el vapeo es algo tan reciente, no sabemos nada sobre sus efectos a largo plazo para la salud. Hay razones para creer que podría ser más saludable que fumar, pero eso no quiere decir que vapear aceite de CBD sea seguro al cien por cien.

¿Por qué mucha gente prefiere vapear?

El vapeo consiste en el calentamiento de un líquido dentro de un cartucho que se coloca en un dispositivo de vapeo. El líquido se calienta lo suficiente para convertir el líquido en un vapor que el usuario inhala.

En un principio los cartuchos se inventaron para la nicotina, convirtiéndose en una alternativa al cigarrillo, pero ahora los usuarios del vapeador también pueden comprar dispositivos para el vapeo de aceite de CBD.

La idea detrás de esta práctica es la eliminación del proceso de combustión. Al fumar un cigarrillo convencional el proceso de combustión crea unos químicos tóxicos y cancerígenos que se inhalan junto a la nicotina y que afectan negativamente a la salud. Fumar permite la inhalación de cientos de toxinas que resultan muy peligrosas para la salud humana.

Reiteramos que por el momento no se han realizado demasiados estudios al respecto, aunque algunos científicos se están esforzando en saber más sobre los efectos del vapeo. Se suele sugerir que los líquidos que se utilizan para vapear contienen una cantidad significativamente menor de toxinas perjudiciales que las que se encuentran en un cigarrillo tradicional, así que parece que no todo son malas noticias.

Además, los usuarios de vapeadores afirman que el vapor resulta más suave en los pulmones que el humo, por lo que el vapeo de aceite de CBD es una práctica más agradable que fumar.

Vapeo o tabaco

Vamos a explicar con más detalle los efectos que tienen la nicotina y los químicos que se inhalan al fumar en comparación con las toxinas de los cigarrillos electrónicos.

Pese a que se han llevado a cabo pocos estudios, sí que se ha realizado alguna investigación preliminar. El Royal College of Physicians de Londres ha sugerido que cualquier peligro para la salud de los cigarrillos electrónicos a largo plazo «probablemente no excedería el 5% del daño que causa fumar tabaco». El Instituto para el Cáncer Roswell Park publicó un estudio en el British Medical Journal en 2013 que explicaba que los tóxicos en los líquidos de los vapeadores eran hasta 450 veces menores que los que se encuentran en un cigarrillo convencional.

El humo del tabaco emite más de 7000 químicos, incluyendo al menos 70 sustancias cancerígenas identificadas. Fumar de forma pasiva también puede ser peligroso, y de hecho se estima que en España entre 1500 y 3000 personas mueren cada año por este motivo. Los cigarrillos electrónicos, por el contrario, no producen los mismos gases tóxicos ni contienen alquitrán, lo que sugiere que podría ser una alternativa más segura.

Además, la nicotina resulta adictiva y por eso a mucha gente le cuesta dejar de fumar. La nicotina no es lo que provoca cáncer y otros efectos sobre la salud, pero no cabe duda de que también causa algunos problemas. Sin embargo, un estudio del Population Assessment of Tobacco and Health (PATH) ha descubierto que vapear nicotina no resulta tan adictivo como fumar, demostrando que los fumadores de cigarrillos tradicionales tienen impulsos más fuertes por fumar que los usuarios de vapeadores.

Qué ocurre al fumar un cigarrillo

Cuando se fuma un cigarrillo se produce una disminución significativa del nivel de la monoamino oxidasa (MAO). Esta sustancia descompone la dopamina, así que tener menos MAO se traduce en más dopamina y eso termina creando la adicción. Aunque vapear nicotina parece producir este efecto con menor intensidad, también ofrece otro beneficio, ya que la disponibilidad de diferentes cartuchos permite a los fumadores reducir el consumo de nicotina poco a poco para ayudarles a dejar de fumar definitivamente.

Esto no quiere decir que los líquidos de los cigarrillos electrónicos no contengan químicos perjudiciales. De hecho, parece que los líquidos de baja calidad contienen sustancias muy perjudiciales para la salud, incluyendo metales pesados como plomo e incluso sustancias cancerígenas. Los líquidos de buena calidad son probablemente más seguros, aunque eso no significa que no puedan provocar efectos negativos.

Por ejemplo, un equipo de investigación de la Universidad de Rochester en Nueva York publicó un estudio que sugiere que los vapores de los cigarrillos electrónicos podrían destruir los tejidos que mantienen los dientes en su sitio, lo que puede dar lugar a problemas en las encías y a la caída de los dientes.

El efecto de los líquidos de vapeo en los pulmones sigue siendo bastante desconocido, aunque se continúa estudiando su seguridad.

¿Vapear aceite de CBD es seguro? Efectos sobre la salud

Por ahora las investigaciones sugieren que vapear no es 100% seguro, así que antes de unirte a la moda es importante que conozcas los riesgos asociados con esta práctica. Quizá sea cierto que vapear es más sano que fumar tabaco, pero eso no quiere decir que sea una práctica recomendable.

Si consumes los líquidos tradicionales con nicotina, seguirás inhalando esta sustancia. Mandeep Bajaj publicó un estudio en 2012 que demostró que la exposición crónica a la nicotina puede provocar un aumento de la resistencia a la insulina y diabetes tipo 2. La nicotina también aumenta el ritmo cardiaco y la presión sanguínea, pudiendo dar lugar a complicaciones de salud.

Los efectos de la nicotina y el vapeo

En enero de 2018 las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de EE. UU. publicaron un informe dirigido por David Eaton en el que se estudiaron 5000 investigaciones y se reunieron pruebas de 800 de ellas. Esto es lo que encontraron:

  • La exposición a la nicotina es variable entre diferentes líquidos y cigarrillos electrónicos. Los usuarios más experimentados pueden controlar el nivel de nicotina que inhalan.
  • La exposición a sustancias tóxicas es significativamente menor con los dispositivos de vapeo que con los cigarrillos tradicionales.
  • La exposición a las toxinas y los carcinógenos se reduce al cambiar del tabaco a los cigarrillos electrónicos. Existen pruebas sustanciales de que un cambio radical reduce el impacto negativo a corto plazo sobre los órganos.
  • Estudios con animales sugieren que vapear durante un periodo prolongado puede aumentar el riesgo de cáncer, pero no existen pruebas de que suceda así en humanos.
  • La exposición pasiva a los cigarrillos electrónicos es menos intensa que con el tabaco.
  • Existe la posibilidad de que los cigarrillos electrónicos exploten y provoquen lesiones graves.
  • Beber o tocar los líquidos de los vapeadores puede aumentar el riesgo de convulsiones o daños cerebrales. Vomitar es un síntoma habitual.

Resultados de estudios

Aunque estos estudios iniciales sugieren que vapear puede tener efectos negativos, ninguno se centra en el efecto que puede tener en los pulmones. Se han realizado otros estudios sobre el tema, y una investigación del American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine de octubre de 2017 explica que los cigarrillos electrónicos pueden dar lugar a respuestas inmunitarias perjudiciales en los pulmones. En este estudio, los vapeadores mostraron un aumento notable de proteínas relacionadas con las NET en las vías respiratorias, lo que puede provocar dolencias inflamatorias en los pulmones. Las NET también aumentaron fuera de los pulmones, hecho que se relaciona con la muerte celular en los tejidos que recubren los órganos y los vasos sanguíneos.

Los vapeadores también mostraron un aumento de las secreciones mucosas, como la mucina 5AC, asociada con problemas como el asma y la bronquitis crónica. Es importante destacar que en este estudio cinco participantes vapeaban y fumaban y doce habían fumado en el pasado.

Otro estudio realizado por la Universidad de Salford, en Inglaterra, descubrió que los líquidos con aroma aumentan el riesgo de daño en los pulmones. La investigación expuso células adultas y embrionarias a vapor con diferentes concentraciones, de diferentes aromas y de distintos fabricantes durante 24, 48 y 72 horas. Los 20 aromas del estudio resultaron tóxicos para las células. Los aromas afrutados resultaron menos tóxicos, pero otros como el café, el tabaco, el mentol o el chicle tuvieron efectos más perjudiciales. Las células lograron recuperarse tras 40 horas, pero tuvieron «serias repercusiones» después de 72 horas.

Bronquiolitis obliterante

La bronquiolitis obliterante es una dolencia descubierta recientemente que se ha relacionado con el vapeo. Se trata de una enfermedad irreversible causada por el deterioro de minúsculas bolsas de aire en los pulmones. Entre 1992 y 2000 se diagnosticaron muchos casos entre los trabajadores de una fábrica de palomitas en Misuri, por lo que en algunas ocasiones a esta enfermedad se le da el nombre de «pulmones de palomitas».

Se cree que esta dolencia está causada por el diacetilo, una sustancia presente en muchos líquidos de cigarrillos electrónicos. Se trata de un agente saborizante que también se utiliza en las palomitas dulces. Aunque no supone ningún problema si se ingiere, la inhalación de esta sustancia provoca bronquiolitis obliterante. Así que si quieres vapear, intenta evitar el diacetilo.

El vapeo y los fumadores pasivos

Fumar de forma pasiva es un gran problema con los cigarrillos convencionales. Se cobra la vida de millones de personas que no han elegido fumar ni inhalar nicotina, lo que convierte este asunto en algo muy serio. Pero ¿qué sucede con las personas que inhalan el vapor de los cigarrillos electrónicos de forma pasiva?

Según un estudio del International Journal of Hygiene and Environmental Health dirigido por Wolfgang Schober, los cigarrillos electrónicos «no están libres de emisiones y sus contaminantes pueden suponer una preocupación para la salud tanto para los usuarios directos como para los pasivos». Los investigadores han descubierto que vapear reduce la calidad del aire en espacios cerrados y aumenta la concentración de HAPs, aluminio, partículas y nicotina.

Por otra parte, existen defensores del vapeo que afirman que eso no es cierto o que la inhalación pasiva no es perjudicial. Algunos equipos científicos destacados dicen que se necesitan realizar más investigaciones y recabar más pruebas para poder corroborar una teoría o la contraria.

¿Vapear aceite de CBD es seguro?

Aunque el vapeo se pensó inicialmente para fumadores que buscaban una alternativa a los cigarrillos, algunas personas ahora recurren a esta técnica para consumir CBD. Como el CBD se está erigiendo como un gran suplemento para mejorar el bienestar y mantenerse sano, cada vez hay más líquidos de vapeo con CBD en el mercado.

Está claro que al plantearse la seguridad de vapear aceite de CBD es necesario tener en cuenta los riesgos que conlleva el vapeo en sí, por lo que toda la información que hemos explicado también aplica en este caso. A continuación hablaremos específicamente del vapeo de CBD y explicaremos si se trata de una práctica segura.

¿Es seguro el aceite que tienes?

Normalmente, cuando se compra aceite de CBD se pretende ingerir de forma sublingual. Si se especifica esto en el envase, es así como deberías tomarlo, así que no intentes poner aceite de CBD en un vapeador. Existen líquidos con CBD especialmente pensados para vapear y que por lo tanto son más seguros. Algunos aceites de CBD pueden ingerirse de manera sublingual o por vapeo, pero deberás comprobar que lo pone en el envase.

Cera cuticular

Las plantas de cannabis, incluyendo el cáñamo, tienen una capa lipídica exterior que cubre su superficie y les aporta cierto brillo. En países donde la marihuana es legal, esa cera se quema al fumar. Sin embargo, con el vapeo no ocurre lo mismo debido a la baja temperatura que implica esta práctica.

Así, las partes aceitosas del aceite se pueden acumular y asentar en los pulmones. Los laboratorios Steep Hill dijeron en declaraciones a la revista Rolling Stone que vapear aceite de CBD puede provocar que esas ceras terminen formando granulomas solidificados en los pulmones. Aunque por ahora se trata de una mera especulación, es algo a tener en cuenta.

Lo cierto es que es posible comprar aceites con CBD para vapear que no contienen cera cuticular. Cuando realiza la extracción con CO2 para obtener el CBD de la planta, algunas empresas aplican un proceso para eliminar la cera de los aceites total o parcialmente. Ese proceso implica empapar el CBD en alcohol y congelarlo.

Neumonía lipoidea

Vapear cualquier tipo de aceite no tiene por qué ser bueno. El aceite es una grasa, y eso significa que vapear aceite introduce lípidos en los pulmones. Esos lípidos se pueden acumular en los alveolos haciendo que la grasa se adhiera al interior de los pulmones. Si esto ocurre se puede llegar a producir una neumonía lipoidea en la que los tubos bronquiales se obstruyen por la acumulación de grasa, dando lugar a graves problemas respiratorios.

Por ahora se cree que este proceso solo llegaría a afectar a usuarios muy frecuentes del vapeo de aceites o que incluso podría no ocurrir nunca, pero no está de más conocer todos los riesgos.

El fracaso del agente anticoagulante

Uno de los grandes problemas del vapeo de aceite de CBD son los potentes químicos que normalmente conforman los líquidos de vapeo de CBD. El aceite crudo de CBD es demasiado denso y viscoso para vaporizarse debido al aceite en el que está suspendido. Para combatir este problema, los fabricantes añaden agentes diluyentes para reducir esa viscosidad. Los aceites baratos pueden contener químicos muy peligrosos, así que es mejor evitarlos y comprobar siempre la composición en el envase. Incluso marcas reconocidas pueden utilizar agentes anticoagulantes potencialmente dañinos, así que presta atención a esta información.

El propilenglicol y el polietilenglicol son dos de los agentes anticoagulantes más utilizados, también en los líquidos de nicotina. Ambos químicos se conocen por descomponer sustancias cancerígenas como el formaldehído y el acetaldehído, principalmente cuando se les somete a altas temperaturas en los cigarrillos electrónicos. Incluso bajas concentraciones de propilenglicol pueden llegar a producir asma, alergias y otras complicaciones respiratorias.

Cómo vapear aceite de CBD de forma segura

Si realmente quieres vapear aceite de CBD puedes hacer algunas cosas para mejorar la seguridad de esta práctica. En primer lugar, es necesario comprar un vapeador de buena calidad. Cada vez existen más estudios que sugieren que la temperatura del calentador del dispositivo tiene un papel fundamental en la seguridad del vapeo, ya que incluso puede determinar cómo se descomponen los agentes anticoagulantes. Los vapeadores de calidad pueden ser más caros, pero no cabe duda de que merece la pena realizar una buena inversión si de ello depende la salud.

Asegúrate de revisar la composición de los envases para saber qué estás inhalando. Intenta evitar químicos potentes y trata de limitar la práctica del vapeo, al menos hasta que se conozcan mejor sus efectos.

Reflexión final sobre si vapear aceite de CBD es seguro

Por ahora no se sabe demasiado sobre la práctica del vapeo, y menos aún sobre el vapeo de aceite de CBD. Como se ha convertido en una práctica muy popular, se están llevando a cabo diferentes estudios sobre el asunto y esperamos conocer más detalles pronto. Lo más seguro es que no conozcamos las consecuencias exactas del vapeo de aceites de CBD en un futuro próximo. Probablemente sea necesario que transcurran varias décadas para poder estudiar las consecuencias en las personas que hayan utilizado los cigarrillos electrónicos durante un periodo prolongado.

Por el momento es buena idea conocer los posibles efectos del vapeo antes de comenzar o de continuar con esta práctica. Así podrás tomar decisiones informadas para proteger tu salud y tu seguridad.

Aunque se tiene la idea general de que vapear es más saludable que fumar, el vapeo también tiene efectos negativos, así que intenta conocer las formas de minimizar los posibles daños.

Por último, si quieres vapear aceite de CBD recuerda que existen otras alternativas. Vapear aceite de CBD es seguro hasta cierto punto y no necesariamente es una práctica demasiado perjudicial para la salud, pero probablemente sea mucho más saludable tomar los aceites de forma sublingual o incluirlos en alguna receta de cocina.

  • https://www.ons.gov.uk/peoplepopulationandcommunity/healthandsocialcare/drugusealcoholandsmoking/datasets/ecigaretteuseingreatbritain
  • https://www.ons.gov.uk/peoplepopulationandcommunity/healthandsocialcare/healthandlifeexpectancies/bulletins/adultsmokinghabitsingreatbritain/2015
  • https://www.rcplondon.ac.uk/guidelines-policy/e-cigarettes-inquiry
  • https://www.salford.ac.uk/news/articles/2017/e-cigarette-flavours-pose-unknown-harm-risk